75 años de vida: Un renovado aniversario que nos encuentra unidos en Comunidad Educativa, Peregrina de Esperanza

2 de octubre de 2025: hoy es un día de inmensa alegría y de profunda acción de gracias, un día en que nuestros corazones laten juntos para celebrar las bodas de diamante de nuestro querido Instituto Magdalena de Canossa. Más que un aniversario, conmemoramos 75 años de Vida, de historia compartida y de un compromiso inquebrantable que ha dejado huella imborrable en cada uno de los que, a través de los insondables designios del Señor, hemos sido y somos integrantes de esta noble Comunidad Educativa: alumnos, familias, docentes, religiosas.

Al mirar atrás, no solo vemos la historia de un edificio, sino el alma de una casa. Una casa que nos ha visto crecer, aprender y soñar, guiada siempre por la luz del Carisma Canossiano y el legado de nuestra fundadora, Santa Magdalena de Canossa. Aquella chispa inicial, encendida con el profundo deseo de «Hacer que Jesús sea conocido y amado», hoy es llama viva que nos sigue convocando y abrigando como una gran familia: …” traten de formarlos para Jesús”.

En esta fecha tan especial, los recuerdos florecen con una calidez que emociona. Resuenan en nuestra memoria las anécdotas de tantas generaciones que han recorrido sus pasillos, las risas en el patio, el estudio en las aulas, los momentos de reflexión en la capilla y la paz de sus espacios verdes junto a la gruta de la Virgen.

Cada rincón de nuestro Instituto guarda un tesoro de historias, de amistades y de crecimiento. Desde aquella pequeña semilla sembrada con la llegada de las Hijas de Santa Magdalena, que comenzó a germinar aquel 2 de octubre de 1950 –día de los Ángeles custodios – como un Jardín de infantes que albergaba a unos 50 niños, y una Escuela de Caridad, que abrió sus puertas al siguiente año, un 2 de abril de 1951 con una matrícula de 120 estudiantes (55 son del Jardín de infantes, 40 de primer grado inferior y otros 25 son de primer grado superior), la Escuela ha ido floreciendo hasta convertirnos en el frondoso árbol que somos hoy. Un árbol que da cobijo a una comunidad vibrante y que se extiende con orgullo en sus tres niveles educativos: Inicial, Primario y Secundario, con cerca de 700 alumnos, donde la misión es acompañar a nuestros niños y jóvenes en cada etapa de su formación de manera integral, preparándolos para afrontar, con estilo canossiano, todos los desafíos que la vida les presente… y cuya visión nos recuerda que:

“la formación del corazón es lo que decide la eficacia de la educación”.

Entre esos primeros pequeños grupos se distinguieron los descendientes de familias italianas de la zona, en su mayoría de condición humilde, siendo un privilegio para estos padres enviar a sus hijos al “Colegio de las Hermanitas”, quienes cual ángeles custodios los reciben con verdadero espíritu canossiano: …

” quien recibe y cuida a estos niños en Su Nombre, lo recibe a Él”

Damos gracias a Dios por su fidelidad, por cada persona que ha formado parte de este camino y por los incontables frutos recibidos a través este ministerio de caridad:

“…dependiendo ordinariamente de la educación, la conducta de toda la vida”.

A la Virgen Dolorosa, que ha guiado la labor educativa a lo largo de estos años en nuestra localidad platense de Los Hornos, le pedimos que bendiga y recompense a cada alma generosa que ha hecho, y hace posible, que el carisma Canossiano siga viviendo y encarnándose en este constante ejercicio de Caridad y Paciencia para con cada niño, adolescente y familias que transitan por nuestra Escuela, a fin de que los auténticos valores humanos y cristianos sean descubiertos, asumidos y llevados a plena madurez por todos. Renovemos juntos nuestro compromiso con la educación, de seguir siendo un espacio de encuentro, fe y caridad para todos.

¡Felices 75 años, Instituto Magdalena de Canossa! Sigamos construyendo juntos este delicado legado de amor educativo que nos ha sido confiado.